viernes, 12 de octubre de 2012

Haití, país ocupado

Por Eduardo Galeano

Consulte usted cualquier enciclopedia. Pregunte cuál fue el primer país libre en América. Recibirá siempre la misma respuesta: Estados Unidos. Pero los Estados Unidos declararon su independencia cuando eran una nación con seiscientos cincuenta mil esclavos, que siguieron siendo esclavos durante un siglo y en su primera Constitución establecieron que un negro equivalía a las tres quintas partes de una persona.

Y si a cualquier enciclopedia pregunta usted cuál fue el primer país que abolió la esclavitud, recibirá siempre la misma respuesta: Inglaterra. Pero el primer país que abolió la esclavitud no fue Inglaterra sino Haití, que todavía sigue expiando el pecado de su dignidad.

Los negros esclavos de Haití habían derrotado al glorioso ejército de Napoleón Bonaparte y Europa nunca perdonó esa humillación. Haití pagó a Francia, durante un siglo y medio, una indemnización gigantesca, por ser culpable de su libertad, pero ni eso alcanzó. Aquella insolencia negra sigue doliendo a los blancos amos del mundo. Haití es un país invisible. Sólo cobró fama cuando el terremoto del año 2010 mató a más de doscientos mil haitianos.

Como de costumbre, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas repite que mantendrá la ocupación militar de Haití porque debe actuar “en caso de amenazas a la paz o actos de agresión”. ¿A quién amenaza Haití? ¿A quién agrede?. ¿Por qué Haití sigue siendo un país ocupado? ¿Un país condenado a vigilancia perpetua? ¿Obligado a seguir expiando el pecado de su libertad, que humilló a Napoleón Bonaparte y ofendió a toda Europa?

¿Será por aquello que los esclavistas brasileños llamaban “haitianismo” en el siglo XIX? ¿El peligroso contagio de sus costumbres de dignidad y su vocación de libertad? ¿El primer país que se liberó de la esclavitud en el mundo, el primer país libre, de veras libre, en las Américas, sigue siendo una amenaza?. ¿O será porque ésa es la normalidad impuesta por un mundo devoto de la religión de las armas, que destina la mitad de sus recursos al exterminio del prójimo, llamando gastos militares a los gastos criminales?

Las Naciones Unidas gastan 676 millones de dólares en la ocupación militar de Haití. Una millonada para sostener a diez mil soldados, que no tienen más mérito que haber infectado al país con el cólera que mató a miles de haitianos y seguir practicando impunemente violaciones y maltratos a mujeres y niños.

¿No sería mejor destinar ese dineral a la educación? Más de la mitad de los niños haitianos no va a la escuela. ¿Por qué? Porque no pueden pagarla. Casi toda la educación primaria es privada y el Banco Mundial veta los subsidios a la educación pública y gratuita. ¿O no se podría destinar esa fortuna a casas habitables para las más de trescientas mil víctimas del terremoto, que siguen viviendo en carpas provisorias? ¿Provisorias por siempre jamás?

¿O consagrar esos fondos multinacionales a mejorar la salud pública, que todavía depende de la milagrosa solidaridad entre vecinos de cada pueblo? Afortunadamente, esas tradiciones comunitarias de ayuda mutua siguen generando la misma energía creadora que ilumina las prodigiosas esculturas y pinturas de los artistas haitianos, capaces de convertir la basura en hermosura y que podrían mejorar si se destinaran a fines civiles los derroches militares.

6 comentarios:

  1. Desgraciado mundo éste de hipócritas que gasta en cosas innecesarias y superfluas una ingente cantidad de dinero que tenían que dedicar a la ayuda al 3er. mundo. Y resulta que después no hay recursos para lo mas fundamental la educación, la vivienda y la comida, que no suponen un gran coste comparado con lo que derrochan en la ocupación del país que supuestamente van a ayudar. Malditos cínicos.

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  2. Gran texto de Galeano, como todos los suyos.
    Lo conocía pero bien recordado, no se nos debe olvidar Haití...

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  3. Hombre, son fuerzas de paz, y las encabeza un imagino más que bien pagado señorito chileno: Juan Gabriel… aunque no canta (o si lo hace no lo sé) y que se apellida Valdés.

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  4. Excelente y sobre todo iluminador para quienes no conocemos muy bien por ingnorancia la historia de este pais. Saludos

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  5. Son fuerzas de paz!!!, comunistas tira de pelotudos sin cerebro... Despues del desatre hubo mucha desorganizacion y desgobierno, la poca ayuda que llegaba era robada y saqueada o dejada en las aduanas porque no habia infrastructura como repartirla.. La comunidad internacional tubo que intervenir y es asi como se envio esta fuerza de Paz que esta compuesta por varios paises latinoamericanos...

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  6. Estoy completamente de acuerdo contigo, la ONU esta ahi para detener los saqueos, dado que los haitianos confundieron libertad con libertinaje despues del terremoto

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