Por Juan Carlos Algañaraz, Madrid
El monarca español vive los peores momentos de sus 37 años de reinado
mientras se acumulan nuevos episodios que no dejan que el escándalo en torno a las andanzas de su yerno, el Duque de Palma,
aumente su poder de deterioro sobre el prestigio de la monarquía. Las
cosas han llegado a un situación tan crítica como para que la Casa Real
(el Rey) haya tenido que proclamar que Juan Carlos “no está
dispuesto a abdicar ni planea hacerlo en el futuro”.
Gran parte de ese desprestigio está estrechamente ligada a la relación de Don Juan Carlos con su amiga la princesa Corinna zu Sayn Wittgestein, (48 años, divorciada). Los vínculos íntimos entre ambos no merecieron una mínima discreción ya que la “amiga del Rey”, como la definen los medios, lo acompañó en viajes oficiales, muy próxima al monarca sobre la alfombra roja de las recepciones protocolares, según los testimonios gráficos.
Gran parte de ese desprestigio está estrechamente ligada a la relación de Don Juan Carlos con su amiga la princesa Corinna zu Sayn Wittgestein, (48 años, divorciada). Los vínculos íntimos entre ambos no merecieron una mínima discreción ya que la “amiga del Rey”, como la definen los medios, lo acompañó en viajes oficiales, muy próxima al monarca sobre la alfombra roja de las recepciones protocolares, según los testimonios gráficos.
Otra foto es más comprometedora de la cercanía de
Corinna con las andanzas de Urdangarin. Se trata del Valencia Summit, y la imagen se captó el 29-10-2004, según precisó la aristócrata. Es justamente ese evento
uno de los negocios turbios más graves del yerno del Rey. Cuando
más necesario era para el monarca que Corinna se callara la boca, la
princesa tudesca se descuelga con una larga entrevista del diario El Mundo.
Corinna ratifica, a todo título de gran despliegue, que estaba en contacto con Urdangarin por expreso pedido de Don Juan Carlos.“El Rey me pidió que ayudara a Iñaki a encontrar un empleo apropiado en una organización internacional y reconocida”, afirma. El
empleo era una ganga descomunal: presidir la Fundación Internacional
Laureus en España, con un sueldo de 200 mil euros anuales. Pero,
Urdangarin, que había presionado a su suegro para que intercediera ante
su amiga, de pronto rechazó la oferta, se asombra Corinna en la
entrevista.
Estas palabras no hacen sino respaldar la supuesta
intervención de “la amiga del Rey” en algunos de los más comprometedores
de los 200 e-mails que entregó el ex socio del duque, Diego Torres, al
juez instructor. Allí abundan las alusiones a una actitud del
monarca a favor de las actividades de Urdangarin que desmienten las
afirmaciones de la Casa Real de que el rey no estaba enterado de las
acciones ilegales de su yerno, ahora imputado por seis delitos contra la
Hacienda Pública, por supuesto desvío de fondos a través de su
fundación Noós.
Torres proclama que sus actividades, y las de su
socio, eran normales ya que estaban supervisados por la Casa Real. Con
semejante respaldo, ¿cómo podían estar haciendo algo irregular? El fiscal los acusa de desviar dineros públicos en su beneficio por valor de seis millones de euros. Corinna
informa que “Su Majestad le dijo a Iñaki que me llamara y viniera a
verme. Así lo hizo en junio de 2004. Vino a Londres a cenar conmigo para
discutir ideas sobre un futuro trabajo”.
“Su perfil me pareció
perfecto para el trabajo en Laureus. Entonces era un auténtico ‘golden
boy’: un atleta olímpico con dos medallas, Atlanta y Sidney, miembro de
una familia real europea por su matrimonio con la Infanta Cristina”,
añadió. Pero Urdangarin acabó por rechazar el empleo. “Cuando no
aceptó la oferta de Laureus, me sentí muy decepcionada. Eso me dejó a
mí, además, en una posición incómoda dentro de la fundación”, lamenta la
princesa. “Le venía al dedo por su posición, pero ahora creo que no era
suficiente para él. Laureus no era ‘El Dorado’”, ironiza Corinna.
En su segunda entrevista la princesa declara que ha trabajado para el gobierno español aunque precisa: “Nunca he ganado un solo euro del dinero de los contribuyentes”. Eso
sí, la princesa afirma que esos trabajos los hacía “sólo cuando se me
ha pedido. Ha sido siempre delicado, confidencial. Son asuntos
clasificados, situaciones puntuales que yo he ayudado a solucionar por
el bien del país”.
Esta confidencia ha sido una desagradable sorpresa para el gobierno de Mariano Rajoy.
Nadie esperaba que Corinna se declarara una colaboradora confidencial
en gestiones super reservadas que realizaba cuando se le “ha pedido”. Los
periodistas corrieron a consultar la revelación de la princesa con el
asombrado canciller José Manuel García-Margallo, quien dijo desconocer
estas colaboraciones. “No tengo noticias de estas gestiones y de todas
formas había que ver a que período se refiere”, dijo.
“Si alguien
pretende utilizarme para atacar a la Familia Real, que no cuente
conmigo. No pienso volver a España mientras mi presencia allí cause
controversia”, advierte Corinna. Y agrega: “Lo que está ocurriendo es
trágico. Me he visto metida en todo esto como si fuera un simple
documento adjunto”.
La aristócrata niega rotundamente tener algo
que ver con los negocios de Urgandarin pese a los e-mails que presentó
el ex socio Diego Torres. “Soy mujer y rubia, lo cual complica las
cosas aún más”, confía la princesa. “Yo no voy a atacar a nadie pero
tampoco voy a dejar que lo hagan conmigo”, advierte.
Yearrrrrrr!
ResponderEliminarAsuntos delicados....vaya que dá para pensar , tiempo atrás leí que esta señora , hacía negocios de armas ! si es así tal vez estuvo ayudando antes de que el ex presidente Aznar nos mandara a la guerra , sería interesante saber si es en esto que ayudó al gobierno español .
ResponderEliminarAsuntos delicados... por el bien del país.... debe de ser que no hay nadie en este país (supongo que habla de España) que pueda hacerse cargo de arreglar "asuntos delicados".... gratis.
ResponderEliminar¡Joder!....Este pais cada dia empeorando por causa de sus politicos y su Real Monarquia
ResponderEliminarCorrupta.¡Es la verguenza de Europa!